Enclavado en el Río Mendo, este molino se encuentra rodeado de todos los elementos necesarios para el disfrute de la naturaleza con mayúsculas.
Rodean al molino las rutas de senderismo más bellas de la provincia, lo que nos una idea del enclave privilegiado del lugar, siendo el río que bordea la parcela y la casa un afamado coto de pesca conocido por la calidad de sus abundantes truchas, de las que podrás disfrutar viéndolas por el canal que lleva el agua hacia los 3 molinos. Lo componen 20.000m2 de parcela con arboleda centenaria autóctona y zona ajardinada.
El puente que cruza el río, y que pertenece a la finca, se convierte en el cenador ideal en las cálidas noches de verano. Un manantial de agua transparente y potable mana directamente la roca.
El acceso a la finca es a través de camino privado y la cierra en su perimetro el propio cauce del río. La casa se encuentra en estado de semireforma aunque la recuperación de la mampostería original así como las impresionantes vigas de castaño que sustentan el nuevo tejado son un claro ejemplo del estilo que se le puede imprimir a este extraordinario paraje.
- Reforma exterior
- Semireforma interior
- Distribución pendiente (de 1 a 3 habitaciones)
- Arboleda autóctona
- Coto de pesca